viernes, 13 de marzo de 2009

Muuuuchachada Nui



Estoy en una zona surreal, un apartado de mí mismo, desvelado a las 2 de la mañana y sintiéndome raro. De esas veces que te sientes mutado, viviendo lo que no toca, extrañado de ti, hormonado tal vez. - No sé si os habéis fijado pero yo siempre pongo una cosa, luego coma, y la redigo de otra manera-. Es muy muy estilo Jordi, marca de la casa -.

Pues chatines, va a ser que hoy toca hablar de Muchachada. Un paseo merecido por su humor abstruso-aivá, ya que esto es la oficina de Viajes Abstruso, como bien sabéis. Una mirada - esta vez coma no, redigo con punto - a estos cómicos que tan buenos ratos me han hecho pasar sin verles casi ningún programa, todo youtubes en vena.

¿Qué se fuman los de Muchachada para hacer los esqueches?? Buen punto de partida para analizar a los manchegos mecánicos nosabes?. Pues quizás es la mezcla de lo puebluno con la actual modernidad, lo que entraña y a la vez descojona, lo rústico en lo chic, lo que produce ese disloque necesario para lo cómico, el absurdo simpático, la risa de la nada. Aparte tienen una tirada con toda su retahíla de expresiones con raigambre, rescatadas de sus pueblos manchegos, que de repente triunfan en los postmodernos, nosabes ricomío. A su minería ochentera nos unimos los nostálgicos, que somos todos, a su admiración por lo viejuno, que no es ni viejo ni antiguo, es viejuno, con su especial matiz, pues como elaborada construcción existe un vocabulario amplio o semi-idioma muchachadiano.

Eso y la espontaniedad de Joaquín Reyes, Ernesto Sevilla y compañía, que sólo por pronunciar las palabras con entonación surreal, son capaces de provocar la carcajada. A quién se le ocurre hacer a Michael Jackson, Mihail Gorbachov o John Travolta con el mismo acento manchego de pueblo, sin variarlo. Pues a un genio, loco, tremendamentes cachondo, capaz de iluminar áreas de la realidad recónditas e inesperadas a cascoporro.

1 comentario:

elnaugrafodigital dijo...

Lo que me gusta de Muchachada es que recupera esa manera de hacer televisión como ya se había perdido: de calidad y con todo el mundo más o menos pendiente de sus acciones. En un tiempo tan fragmentado e internetizado era casi imposible lograr algo así. Y allí están, como fijando un poco los cimientos de "estos años". Creando un poco de pasado para el futuro. "Os acordáis de aquellos tipo, si, como se llamaban, coño, ¡muchachada nui!".



Y otro apunte. El otro día caí en la cuenta de que J. Reyes era el tipo aquel casposo y asqueroso y que salía en Lo+Plus, haciendo coñas que a poca gente gustaba. A mí me hacía gracia, la verdad. Pero el tío era un don nadie. Ahora son don todo.