jueves, 5 de enero de 2012

Los pantanos de Internet

Internet es una calle más, una arteria gigante donde puedes comprar, consultar, charlar, diseñar, lo que te plazca. Casi podemos decir que el mundo era más pequeño antes de Internet, que el imaginario ahora sí que está urbanizado, y la mente tiene los coches que antes no existían.

Pero si hay algo curioso en esta nueva parte del mundo, es que es una ciudad sin ley, como una especie de lejano oeste poblado de espíritu pionero, fuera del alcance de los culos conservadores que aún se maravillan con el teletexto. A un click puedes contratar sicarios en una web, navegar por galerías de menores desnudos, traficar con substancias ilegales, invertir en estafas pirámidales gigantescas que recaudan dinero durante años indemnes, o aprender a fabricar bombas para atentados.

Mucho sargento de la policía todavía le da al teletexto y a las amotos. La policía tiene un culo conservador, bien sentado dos décadas antes. Sólo esto explica un culo tan inpuntual y poco profesional, capaz de tener una intervención anecdótica en el presente, y de ser tan efectivos en el pasado. No me quiero imaginar el miedo que a la vieja guardia le ha cogido al sentarse frente a un ordenador, oh ente-araña capaz de absorber a uno.

Sigo con la línea "haciendo amigos" como veis. Pero hay ciertas cerrazones que pueden ser un mal del mundo infusionado y disimulado. Usted se adapta a los tiempos, no los tiempos se adaptan a su caspa. Y la autoridad no se demuestra con goleadas fuera de su "casa", como un sabueso encelado.
El espíritu de Steve Jobs nos libre, de un intervencionismo excesivo de la policía en internet, pero que alguien les explique de qué va esto. Probablemente la policía siempre irá a la zaga de los tiempos, y sus nuevas generaciones hacen lo que pueden con los medios que disponen, pero todavía queda caspa que despojar de su cuerpo.

1 comentario:

Yves dijo...

Ups... això és un arma perillosa... Internet, a simple vista, és un lloc lliure, tan lliure que fins i tot es pot practicar el llibertinatge. Tothom, des de l'anonimat -o no- pot dir el que vulgui i publicar el que vulgui.
Si comencem a censurar... passarà el de sempre, necessitarem un organisme que sancioni, i és clar, aquest estarà controlat per un organisme superior; és a dir, que hi haurà qui decidirà què està bé i què està malament...

Això, suposant que és un lloc lliure, que jo crec que no. La policia a Internet existeix, però no la espanyola, està clar... els d'aquí amb prou feines saben encendre l'ordinador...